El grupo de moda en el 2001 con el album "Is this it" algo más tarde se ganó a pulso que no lo era tanto. No es tampoco que yo lo lamentara y me atrevería a decir que tampoco ellos.
En 2006 se arrancaron con su obra cumbre hasta la fecha "First Impressions of earth" y tras un parón de 5 años volvieron a editar un album decente pero no a la altura de su regreso.
Ahora en 2013 presentan "Comedown machine" que sugiere la perfecta fusión entre los ritmos digitalizados con aroma a los 80's de la aventura en solitario de Julian Casablancas, vocalista de la banda, con el quehacer del resto de los Strokes aludiendo a su trayectoria.
El resultado es satisfactorio, puede que algún tema del album pudiera resultar algo insustancial, que otro mire hacia una banda de Rock latino o que ocurra con sus fans incondicionales algo parecido a lo que ocurrió con aquel "algo tenía ese album de diferente para que a mí me gustara" de Muse en 2012.
He de reconocer que The Strokes en este disco recuperan, de manera menos profunda eso sí, parte de la magia que brindó al panorama musical en aquel "First Impressions..." aunque todavía no alcancen aquel estatus que algunos críticos le asignaron en sus inicios de "salvadores del Rock".
He de reconocer que The Strokes en este disco recuperan, de manera menos profunda eso sí, parte de la magia que brindó al panorama musical en aquel "First Impressions..." aunque todavía no alcancen aquel estatus que algunos críticos le asignaron en sus inicios de "salvadores del Rock".