Y como iba diciendo....
No hay duda que Testament son una de las bandas de referencia del Thrash Metal mundial. Estandartes de la Bay area publican su primer larga duración en 1987 ("The legacy") y periódicamente continúan su producción discográfica hasta aproximadamente 1999 ("The Gatering") donde hacen un parón de casi diez años sorprendiéndonos con un regreso en 2008 presentado "The formation of Damnation".
En 2012 lanzan "Dark roots of earth", el caso que nos ocupa.
En este último album, con una estupenda carátula muy en su línea, nos ofrecen un conjunto de temas de Thrash metal de corte clásico, perfectamente ejecutado y con una producción contundente y efectiva, dirigidos a fans del género y, claro está, del sonido más básico y crudo de la banda.
Las canciones, sin embargo, no ofrecen nada nuevo en su trayectoria y se suceden sin que ofrezcan una identificación clara entre ellas combinando riffs carentes de originalidad con solos vertiginosos y un estupendo trabajo vocal por parte de Chuck.
Bien es cierto que Testament en la actualidad mantienen un estatus de leyenda del género y no les queda nada que demostrar. O sí. Lo que está claro es que han realizado un buen ejercicio de Thrash metal básico pero lamentablemente algo monótono y, hay que reconocer, sin excesivo brillo.